martes, 14 de febrero de 2012

Cumpleaños..

El día en que ella se hizo mayor le crecieron pestañas en los ojos.

Se hizo amiga de una sombra despeinada y las flores se marchitaron a su paso. No hubo pastel de cumpleaños, sólo un pedazo de helado y palillos como velas. Las ancianas sonrieron con lástima al verla llegar, pensaron: "Pobre, tan joven y tan arrugada".

La vida, a veces, es más dura que una pared de hormigón. Pero otras brilla durante un segundo y la música suena en un salón de baile. Es entonces cuando los zapatos de tacón tienen más de doce centímetros y los vestidos esconden lo que el corazón no puede.

Pero ella se había hecho mayor y no encontró zapatos de su número. Ni alpargatas. Ni siquiera fundas de esas que te dan en el hospital justo antes de entrar al quirófano a desprenderte de un pedazo de ti.

A veces hacerse mayor es aceptar que hay cosas que siempre formarán parte de ti. Los dolores, las arrugas de los ojos, la ropa pasada de moda, o el sexo que alguna vez disfrutaste en un cuarto de baño.

jueves, 27 de enero de 2011

Maternidad..

Al fin puedo decirlo. He sido madre. Dejando de lado el hecho de que no he sufrido las náuseas, los vómitos, los dolores de espalda y la dolorosa dilatación vaginal. Y dejando de lado también el hecho de que no había un padre que satisficiese mis antojos, porque, embarazada o no, también los he tenido.
El caso es que una personita ha llegado a nuestras vidas. Y digo nuestras porque no sólo me corresponde a mí, sino que también ha pasado a formar parte de la vida de mis vecinos. Y es que han sido ellos, unos de mis vecinos, los que han sido padres. Y yo estoy tan metida en la empresa que siento que el niño, o niña, -no conozco el sexo del susodicho- también es algo mío.
Sé que es algo extraño, pero las cosas son como son. Y es que he acoplado tanto mi ritmo de sueño al del bebé, que ya sólo me falta levantarme para darle el biberón. Es un bebé muy exacto, matemático, de los que se despiertan justo a las tres horas berreando como terneritos. Y no deben darle el pecho, porque tarda demasiado en serenarse. Si fuese cuestión de tetas, bastaría con meterle una en la boca en el momento preciso en que amenazara llanto. Pero no. Hay que levantarse, ir hasta la cocina, calentar el agua, diluir la leche en polvo, volver al dormitorio y lograr que el niño, o la niña, se enganche a la tetina. Algunas noches me levanto y en lugar de preparar el biberón, me preparo un té, mientras pienso en lo maravilloso que sería bebérmelo como un bebé, chupando como si me fuera la vida en ello hasta que el sueño llegara.
En realidad, el problema de todo esto es que, por alguna razón que desconozco, cada noche acabo metiéndome en la cama a la hora precisa en que el bebé despierta. Cada noche a las cuatro de la madrugada. Y es tan complicado dormir cuando tu hijo llora y llora y llora en el cuarto de arriba. Y luego está el arrastrar de pies, y el “piiin” del microondas, y la cisterna del baño, que ya que uno se despierta pues aprovecha y mea. Vamos, que esto de tener hijos es un sin vivir.
He querido ser madre desde que recuerdo, pero hasta ahora la experiencia no está resultando muy grata. Quizá porque mis vecinos se olvidan de bajar de vez en cuando para que le haga alguna carantoña al bebé. Y el llanto, por sí sólo, no me basta.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Recetas de c o c i n a

Desdibujarse. Correr hacia atrás. Saborear la nada que absorbe-te. Colorear después. Apuñalarse. Una, dos, cientroveintitrés veces. Rellenar las heridas con algodón. Coserlas con hilo dental. Retirar los puntos de sutura con los dientes. Limpiarse después. Cantar bajo la ducha con vez desafinada (la voz se perdió hace tiempo). Meter los pies descalzos en agua hirviendo. Hacer siluetas con las ampollas. Vendar después. Envenenarse con ácidoacetilsalicílicoantidepresivosypastillasvariadas. Desprestigiar el estómago. Deshacer intestinos. Vomitar después.
Meter la vida y sus consecuencias en una olla de cobre. Cocer a fuego lentorápidolentorápido. Esperar a ser capaces de digerir la receta. Y vivir después.

miércoles, 27 de octubre de 2010

¡Apostatar, qué gran turrón!

Por fin lo tenía claro. Tras años y años de bendito estudio en un colegio de teresianas; tras las múltiples hostias recibidas en cuerpo y alma; tras tantas batallas perdidas contra el uniforme marrón de pata de gallo, al fin llegaba mi oportunidad. Habían pasado más de diez años desde que abandonara el colegio, y mi espíritu santo, pervertido por otros espíritus menos santos que yo, se rebelaba contra Dios y contra el mundo. Iba a verme libre de tan pesada carga y así recuperar, de paso, mi estatura original, que por otra parte, no iba mucho más allá del metro sesenta, cago en… El caso es que, con los adelantos de las nuevas tecnologías, aquellos papeles por los que suspiraban muchos como yo, estaban en mis manos. La apostasía era mía. Yo tenía el poder. Sólo faltaba imprimir y listo. Unas cuantas hojas que rellenar y adiós a Dios y a su Santa Madre. Pobre ilusa. Ser estúpido. Cándida de mí. Esto de apostatar es más difícil que solucionar el hambre en África o la pobreza mundial con la ayuda de la Iglesia. Papeles y más papeles, colas, visitas al juzgado, firmas, esperas, y como único apoyo, la firme convicción de abandonar la Iglesia y a toda su santa plebe. Total, que le vi las orejas al lobo. Así que, visto que el tiempo corre, que las hostias sólo las veo en la tele y que la pata de gallo vuelve a estar de moda, he decidido posponer tan ilustre misión y emplazarla a futuras obsesiones. Igual me lo apunto como primer propósito de año nuevo. Porque otra cosa no, pero la Navidad está a la vuelta de la esquina.

miércoles, 30 de junio de 2010

La moto..

Viajar en moto es como meterse de lleno en un torbellino.
Es dejar que te lloren los ojos, que se erice el vello de los brazos, que el aire fluya entre la ropa.
Viajar en moto con los ojos cerrados es como pertenecer a otro tiempo y otro lugar, es estar en todas partes a la vez y en ninguna.
Viajar en moto de noche es llenarte los ojos de luces que pasan a toda velocidad y sentirte parte de ellas, como una partícula minúscula que vuela más allá del tiempo y del espacio.
Y a la mierda con las huelgas de metro, y con los autobuses llenos, y con la gente que se da de hostias por nada, y con los niños estúpidos e irrespetuosos, y con las señoras gruñonas... a la mierda con todo y con todos.
Regálame un casco y llévame a tu espalda, que me apunto.

jueves, 1 de abril de 2010

Hay..

Hay cosas que todavía pinchan, hay cartones de leche caducada que nos empeñamos en beber a pesar de saber que es algo inútil, algo que nos hará vomitar y morirnos por dentro. Hay cosas que huelen a podrido, a capítulo acabado, hay cafés demasiado dulces o con aroma a chocolate blanco, hay copas vacías en bares vacíos con gente vacía. Hay reductos del alma que pintar con rotuladores negros, negro sobre negro y más negro sobre ese negro caduco. Hay la vida con sus neuras neurosis psicosis pastillas para dormir y cera en el pelo. Y esa otra vida que es la que no contamos. Hay letras que se escriben en vasos de ron y otras que mueren en el último tercio de una tarde de primavera. Hay te quiero importantes como una sombra y otros que se dicen en un apretón de piernas. Hay carcajadas, miradas adolescentes, orgasmos múltiples y corridas en tapicerías de cuero. Hay lo que olvidamos y lo que dejamos caer, hay carreteras sin salida y desvíos a nivel, hay amigos de una noche y noches llenas de amigos, hay amigos de amigos, gente que conocemos un día y nos olvida al siguiente, hay cuentas hacia atrás, hay promesas de última hora y de primera, hay buenos y malos, hay esperanzas y desengaños y visitas a la taza del váter y puñetazos en paredes y comida japonesa y paseos por calles ruidosas. Hay un transcurrir lento de todo y de nada, y hay prisas y nada que comer. Hay drogas y otoños de hojas caídas y botones sin ojal y amores que caducan y otros que no empiezan. Hay mensajes sin abrir y mensajes con mentiras.Hay libros y copas de vino y ordenadores portátiles y vidas portátiles y sentimientos portátiles que guardar en un bolsillo hasta perderlos. Y luego hay lo que somos y lo que creemos ser. Y las cosas casi nunca huelen felices.

jueves, 18 de marzo de 2010

???????

La gente deberia aprender a limpiar su propia mierda. No me gusta encontrarme los restos de los demas, me da asco. Sobre todo despues de comer.

Para algo se inventaron las escobillas de lo que despues todos llaman wc. Tan finos para una cosa y tan cerdos para otra.

(Y si no pongo tildes es porque este ordenador se niega, joder..)

domingo, 28 de febrero de 2010

Puaj..

Los sábados tienen un algo de desconcertante que no llega a gustarme. Sobre todo cuando van precedidos de viernes en los que pierdes el control y lo único que te apetece es beberte toda tu mierda a morro. Y lo haces. Lo haces con tanta ansiedad que cambias el estómago de sitio. Y pasas todo el sábado intentando encajarlo de nuevo.
Hasta hace un rato era sábado. Hasta hace un rato he estado intentando recomponerme. De la cabeza a los pies. Del cerebro a las entrañas. Ninguno de mis intentos ha dado resultado. Y el reloj ha dado paso a un domingo que imagino tan estúpido como este sábado acabado. Tan estúpido como casi todas las horas que paso intentando encontrar respuestas a preguntas que no la tienen.

Así que voy a tomarme unos cuantos días de vacaciones. Voy a dejar todo eso de lado. Todas las preguntas.

Estoy harta de tanta gilipollez y de tanto gilipollas. La primera yo.

martes, 23 de febrero de 2010

Kantor..

Hoy ha sido un día raro, como lo son esos en los que sale el sol y a los dos minutos te empapa una tormenta, y vuelve a salir el sol y sales a fumar, y antes de darte cuenta tu cigarro es infumable porque se ha empapado, y vuelve a salir el sol pero tu cigarro no lo seca ni dios... y el tiempo se convierte en una espiral de la que estás deseando salir.
Y entonces te vas a comer y la comida te sienta como un puñetazo en el estómago y tienes ganas de vomitar pero te aguantas y luego se te pasan y entonces te tomas un café (sin azúcar, por supuesto..) y otro y luego otro porque te duermes de pie y aún tienes que aguantar muchas horas metida entre esas paredes.
Y te vas a dar una vuelta y te cruzas a gente por los pasillos y casi todos te saludan, algunos te dan un beso o un abrazo o las dos cosas y te ríes y te gusta y piensas que ojalá fuera así siempre y bajas las escaleras y te vas al frío y te reciben más brazos y más sonrisas y unas cuantas cabezas que funcionan a toda máquina a pesar de todo.
Y entonces llega. La oscuridad, las velas, el pasillo, los pies que se arrastran, el ruido de cañerías, la puerta que se abre, la sala a medio hacer, el hierro, el cristal, la madera... y yo, que me dejo ir...

yo, derramada..
yo, crucificada..
yo, guerrera..
yo, canción..
yo, ahorcada..

yo, muerta.. muertos, nosotros..

y otra vez, vamos a contar mentiras, tralará, vamos a contar mentiras, tralará, vamos a contar mentiras..

VENGA, VAMOS A CONTAR MENTIRAS..

domingo, 14 de febrero de 2010

Domingo..

Café+café+café-----> nervios
!
!
!
!
!
LEXATÍN---------->sueño
[café]


película---------> me agarro a un cojín a falta de algo

[MEJOR]


Otro domingo cualquiera..

lunes, 18 de enero de 2010

Estar..

Estoy jodida pero contenta.

A estar jodida se acostumbra una. Estar jodida significa no saber qué coño hacer con tu mierda de vida, con tu mierda de letras, con los días largos y aburridos, con los agujeros negros, con la soledad, con la piel fría. Estar jodida significa pasar los días de cara a la pared, y vomitar, en sentido metafórico, al reflejo de un espejo sucio de cualquier baño, y tomar decisiones absurdas y saber que no vas a llegar a ninguna parte, así no, y rendirte por segundos y decidir que tienes que espabilar pocos segundos después y ahogar la mierda en vasos de ron y tercios de cerveza, y cultivar patatas en absurdas pantallas de ordenador y escupir el desprecio que atesoras para no ahogarte y seguir aunque sea sin ganas y a pasos de ratón.
Estar contenta significa no saber qué coño hacer con tu mierda de vida pero no dejar que importe, ser capaz de coger esa llamada de teléfono, contestar mensajes y mails al momento, andar despacio y con miedo pero sin dudas, y decirte "las cosas están bien así, atrévete", y pasar la noche en habitaciones desconocidas y dormir en Madrid en pleno enero con la ventana abierta y nada de piel fría y dejar que alguien te tome de la mano y apretarla y respirar y no dormir hasta que ese alguien te calma compartiendo tu espacio y no querer salir corriendo sino estar.

Estar.

martes, 12 de enero de 2010

Mierda..

Últimamente todo me huele a mierda.

La calle huele a mierda, la gente huele a mierda, los ricos huelen a mierda, incluso la administración de loteria que hay al lado de casa huele a mierda.

Yo huelo a mierda.

Y me hundo y me hundo y me hundo, y lo único que entiendo de todo ésto es que lo que más necesito ahora, en este preciso momento, es una patada en el culo. Para salir de mi mierda de mierda. Y tomar aire.

Pero cuidado, no me vayáis a meter el pie en el agujero, no estoy hablando de niculismo. Hoy no.

Aunque ganas me dan de volver a meterme toda esa mierda por el culo. Siempre fui muy dada a los procesos inversos.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Ropa sucia..

Entre tanto temblor de manos y de hilos que manejan el corazón, se ha vuelto neblina oscura la parte izquierda de mi cuerpo..

enredada entre todas esas voces que me susurran pesadillas cuando quiero quedarme dormida, se desespera mi razón.. flirtea con la idea de un salto al vacío que mi parte derecha jamás se atreverá a dar..

y mi yo, el completo, sigue andando sobre cuerdas de tender las ropas de otro tiempo.. cuerdas que se hunden bajo el peso de la nieve ..

y mientras, lavo bragas y camisetas del mercadillo, sumergiendo mis manos en agua fría para no tener que recordar ese calor que se escapa cuando menos te lo esperas..

y mi lavadora se queja, celosa, y decide morir de hastío..

y yo muero de asco y de ganas y de estar de mierda hasta el cuello y de la necesidad de decirte que nunca acabó nuestro último lavado..

sábado, 12 de diciembre de 2009

Gotelé..

Goethe inventó el gotelé (léase Guete)..

lo ha dicho mi amigo Diego, que es poeta porque le peta..

Análisis de texto:
Podemos deducir de la primera parte del texto, joder como estoy, me aburro, a tomar por culo!!

Mañana me aclaro..

Fin.

Mejor dicho, me voy a dar un baño a la piscina a ver si me acloro.

Hostia qué malo!!

Y ahora sí, FIN.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Poema del culo..

Para Nico..

Voy a empezar a hacer botellón
en la Plaza de Culo

me sentaré dos horas
sobre mi culo

como todos

y será un botellón
de culos fríos

más fríos que la cerveza
que nos venden los chinos

culos fríos
y encogidos

en la Plaza de Culo

Definiciones.. de ida y vuelta..

V: P, ¿qué es azuzar?
P: Espabilar.
V: ¿Y azuzar el fuego?
P: Espabilar el fuego.

martes, 24 de noviembre de 2009

Tira p'al baño..

Tengo un amigo (un amigo que pensará "pero si yo no soy su amigo" cuando lea ésto)con el que he hablado un par de veces de la enfermedad del pis. Fue él quien le puso nombre. Él la tiene y yo también.

La enfermedad del pis consiste en eso. En tener siempre ganas de hacer pis. Cada vez que acaba la clase, tomamos el camino de baldosas blancas (las amarillas se habían acabado) que lleva al baño, y allá que te vamos. A hacer pis. Para ser un poquito más felices. Lo malo de eso es que aproximadamente una hora y media después tenemos que hacer lo mismo. Y así somos otro poquito más felices. A veces, incluso me escapo en mitad de la clase.

Y ahí sí que soy feliz.

Porque no sólo hago pis, sino que además me libro durante unos minutos de todos esos rollos que me sueltan en el cole. Rollos de los que después nunca me acuerdo. Será por esa otra enfermedad.

Además de la del pis, tengo la enfermedad del sueño..

Como diría otro amigo... ¡bendito mojete!

miércoles, 28 de octubre de 2009

Tonta..

Me duele la cara de ser tan tonta..

viernes, 16 de octubre de 2009

El espacio y yo..

El otro día intenté explicar mi relación con el espacio. El que ocupo, el que habito, aquel por el que me muevo.

Qería contar que a veces las paredes engañan, y se estrechan hasta que no me queda más remedio que chocar con ellas y llevar su marca grabada durante más de una semana.

Y que no sé medir las distancias, ni los pasos, en habitaciones cerradas ni en grandes avenidas ni en callejuelas ni en parques ni en la plaza de mi pueblo. Ni siquiera he aprendido el espacio de mi cama.

Y M.B se ríe de mí porque cree que todo pasa porque soy una inconsciente, una inconstante y todos los palabros que empiezan por incon.. que seguro son muchos. Y como a lo mejor es verdad, y para reafirmar mi pertenencia a P.A.N (ya sabéis, Plataforma de Apoyo al Niculismo), he decidido meterme todos los incon por el culo.

Espero que la agudeza de las "n" no dañe mi precario equilibrio intestinal..

lunes, 6 de julio de 2009

Andreaaaaaaaaaa, Samueeeeeeeeeel!!

He decidido asesinar a mi vecina de enfrente..

en realidad nos separan un parque y dos carriles de distintas direcciones (unos cuantos metros, vaya..), pero es tal el volumen de su voz que se ha convertido en mi despertador cada mañana..

dónde quedaron las relajadas vacaciones en las que despertaba con los rayos del sol rozando tenuemente mi mejilla??

si es que donde esté un buen grito, o diez, que se quite todo lo demás..

lo cierto es que la decisión está tomada.. yo la mato!!
eso sí, se aceptan sugerencias..