jueves, 26 de febrero de 2009

Enamorarse

Me enamoro una media de seis o siete veces al día. A veces de una cara, otras de unas manos, de una sonrisa, de la caída de unos vaqueros, de un flequillo desigual...
Otras veces me enamoro de instantáneas. Momentos fugaces que retengo en la retina sólo durante unos segundos para después dejarlos escapar.

Hoy me he enamorado exactamente de una calva reluciente, de una mano que acariciaba un maletín de piel marrón, de una barbilla apoyada en una solapa, de un movimiento de cabeza y de un roce momentáneo e inesperado que me ha hecho cosquillas en la palma de la mano..

Teniendo en cuenta que ayer me enamoré de una farola con la que choqué por ir mirando al suelo (era preciosa, creo que acababan de pintarla..) y de un chicle rosa brillante que dormitaba al lado de la farola, hoy ha sido un día muy completo..
eso sí, al llegar a casa, ni manos ni cabezas ni solapas ni farolas ni ganas.. un plato de pasta fría y una tableta de chocolate, que también anima..

menos amor da una piedra!

1 comentario:

celemin dijo...

Yo no tantas veces, pero alguna si...